miércoles, 24 de septiembre de 2008

amanece el 31.


Dia 31 de agosto. Domingo


Tras el desayuno decidimos estudiar un poco (los apuntes siguen en la maleta desde que llegamos) y después nos iremos solos a la capital Itaparica. Una combi nos lleva hasta el cruce (trocamento) a Mar Grande y allí otra combi nos llevara hasta Itaparica. Llegamos a la plaza de la que nos hablo wander, llena de arbolacos y terracitas de restaurantes al lado del paseo marítimo. Aquí vemos algún turista aparte de nosotros (5) y nos comemos una moqueca de pescado disfrutando como siempre. Tambien hay gente de la isla o bahianos. En la plaza hay una mujer vestida de bahiana que prepara comida típica, una especie de empanadillas rellenas de un puré de cuyo nombre no me acuerdo y otros ingredientes a elegir. Itaparica resulta ser preciosa, muchas casas de estilo colonial y pintadas de cal coloreada, paseo marítimo y playa que hoy como es domingo esta llena de gente. La música se oye por todas partes. Es mucho mas turística que Cacha Pregos. A las 4 tomamos la combi que nos llevara al trocamento de nuevo y luego otra que nos llevara a casa. Paramos en barraca de playa y tomamos cervecita helada viendo atardecer. Al anochecer de vuelta a casa oímos música en la plaza y nos acordamos del Hierro. Resulta que los fines de semana montan baile y sobre todo el domingo se llena de gente. Tocamos marro en casa y volvemos al baile, claro. Aquí se ha puesto de moda la ceresta (creo que se llama asi) y es música enlatada sin parar con un cantante y un teclado .Suena sin parar lambada, y otros ritmos similares que todo el mundo baila estupendamente, incluso nosotros. Santana que esta con un matrimonio amigo nos hace sentar con ellos y nos prepara caipirinhas (terminare enganchada) hoy por fin nos acostamos a una hora normal, las 12…

y así llegamos al 30 de agosto...



30 de agosto, sábado

Hoy toca de nuevo sesión a las 6,30 y después del desayuno paseo por la playa a buscar semillas. Hoy como no hay colegio hay muchos niños por la playa y mas gente. Comemos con los wander en Luna Nueva y probamos el plato típico de aquí, la moqueca. La hacen de todo, de camarones, de pollo, de langosta, de pulpo. Hoy la comemos de camarones y esta buenísima ¡no voy a comer otra cosa! Por la tarde wander nos lleva en barca a otra zona del manglar, hacia el pueblo de Catú , esta vez se mezcla con tierra y bosque de palmeras lo que lo hace mas exuberante, vemos montón de pájaros, garzas grises y blancas, martín pescador, periquitos. La vuelta la hacemos pasando frente a la costa de Catú que con la luz del atardecer es alucinante ¡aaaggggg! Vemos la puesta de sol desde la barca. No tengo palabras. Esta isla es un paraíso para los sentidos.

el 29;



Dia 29 de agosto, viernes

Hoy no hay sesión. Tras el desayuno tropical-español Wander nos lleva en su barca al arenal y hay que ir pronto porque a las 11 te socarras. El sitio como no, espectacular, parece que estás en otro planeta todo blanco y azul, es un espacio cambiante, depende del día y la hora todo cambia. Hay una zona de palmeras y bosque que pertenecen a la misma hacienda, no obstante almorzamos en una zona a la sombra que descubrió Wander. Todo es sorprendente, estamos encantados. Sobre las 12 volvemos. Hoy toca comer en el restaurante de Renato “luna nueva” nos pedimos pescado. Aquí todo lo acompañan de arroz y frijoles que me encantan. Comemos al aire libre, viendo el mar ¡como no! Antes de la siesta se nos ocurre tomar un caipirinha (estamos tan cerca de la barraca de santana) luego la siesta es inconmensurable. Hoy toca ver la puesta de sol desde la barraca de Elías el “caiamba” y resulta especial, puesta de sol alucinante, temperatura perfecta, suena la musica brasil y elias toca la armonica. Cuando nos vamos ya oscurecido me doy cuenta de que no te vas, te sales. Entramos y salimos de cuadros distintos y alucinantes desde que llegamos.


y llegó el 28 de agosto...


Día 28 de agosto de 2008

A las 5,30 empieza a amanecer y aquí todo se pone en marcha con la luz del sol, las personas, los pájaros, los perros y nosotros! Nos hacemos la 1ª sesión de yoga en la playa y cuando volvemos a casa son las 8 y tenemos el desayuno listo a base de zumos, frutas tropicales, mmmm… café, té, pan con aceite de oliva y jamón! Hoy hacemos paseo tempranero por la playa que en marea baja es inmensa, a las 11 y ya de vuelta (aquí el sol casca de lo lindo y aunque es invierno estamos en el tròpico) hacemos parada en el caiamba, otra barraca en la playa donde nos tomamos unas cervezas heladas a la sombra de unas palmeras ¡como reyes! Subidon, subidon. Volvemos a casa un poco socarradillos a pesar de las precauciones y a la 1 nos vamos a comer con los wander (aquí se come muy pronto) a un pueblico de al lado donde se come al kilo (ni que decir que aquí no hay restaurantes para turistas, los que hay son los utilizados por la gente del lugar) a las 2 nos espera carlinhos que nos dará un paseo en canoa de 2 o 3 horas por el manglar. Que sitio, que silencio. Aquí se mezcla el agua salada con la dulce y crece el mangle un árbol cuyas ramas buscan el agua hasta llegar al fondo. El paseo resulta espectacular, distinto. A la vuelta llegamos a tiempo de ver la 2ª puesta de sol. Alaaaaa! Luego hacemos alguna compra para tener algo en nuestra cocina para las cenas. De nuevo el sueño nos ataca, pero aun nos conectamos a internet y mandamos algunas foticos que nos cuesta un verano. Y así han pasado ya 2 dias, presiento que se va a hacer corto…




domingo, 21 de septiembre de 2008

27 de agosto en Itaparica

Día 27 de agosto 2008

Desayuno en el hotel y un taxi nos lleva al mercado modelo, al lado se encuentra el puerto de donde salen las barcas que llevan a Itaparica. Esperamos rodeados de bahianos. Por fin salimos y mientras nos alejamos de la costa podemos apreciar la diferencia entre la parte antigua de salvador y la moderna que parece Manhatan . Otros 40 minutos mas o menos le cuesta llegar a Mar Grande en la isla y según indicaciones nos vamos a la derecha donde las combis esperan para llevar a los distintos pueblos de la isla. Tomamos una bien destartalada que nos lleva a Cacha Pregos, no sin antes hacer 50 paradas para recoger personas que esperan en los pueblos o a lo largo de la carretera. Mientras uno conduce otro va gritando la dirección que llevamos para saber si tenemos que parar y también cobra. Así 1 hora después llegamos a Cacha Pregos donde Wander nos espera con su coche para llevarnos a la casa. Nos enseña nuestras posesiones (porque estamos solos) y su casa. Nunca había estado durmiendo tan cerca del mar, arena blanca, lleno de palmeras, totalmente tropical ¡y sin turistas! Nos cambiamos y a la 1 nos vamos a comer a un sitio en el pueblo que dan pescado frito. Conocemos al padre de Wander, Jose Luis. Después de comer, Wander nos enseña el pueblo que es muy pequeño, 2 o 3 calles 2 plazas y el mar, uff! Precioso, parece mentira que exista un lugar así sin turismo masivo. Volvemos a casa y probamos las hamacas que cuelgan de poste a poste en el porche, siestecica. Al caer la tarde (aquí anochece a las 5,30) vemos la 1ª puesta de sol ¡genial! Luego nos vamos a una de las barracas que hay a lo largo de la inmensa playa y nos tomamos la 1ª caipirinha. Buenísima. Volvemos a casa y aun son las 8 pero con el cambio de horario (en zaragoza seran la 1 am) nos caemos de sueño. Aun así aguantamos hasta las 10 y a dormir.

Samba de Roda


Con la firme intención de aprender a bailar samba de roda nos trasladamos a Brasil. Nos ha gustado tantísimo que queremos compartir con vosotr@s nuestro placer.
Salimos el 26 de agosto de Madrid a Salvador de Bahía. Patria de Carlinhos, de Wander, Adri y de otras y otros muchos genios tostados...
Día 26 de agosto 2008

Hablamos claro de O'recanto dos Sabiás
mas o menos el paraiso aqui, al lado...

Aterrizaje perfecto en salvador de bahía a las 7 de la tarde. Aplausos. Pasamos el vino, el aceite de oliva y el jamón sin problemas! Un taxi nos espera (este wander esta en todo) que nos lleva al hotel imperial en salvador tras 45 minutos de avenidas con un monton de circulación. El conductor que se llama pereira es amante de la música, así que hacemos el recorrido escuchando buena música brasil. Descargamos las maletas y pereira nos lleva a un restaurante a la orilla del mar para cenar. Parrillada y clavada pero todo es perfecto!


Mirad que fotos tan tropicales