lunes, 31 de octubre de 2011

de los flagelamientos y el EGO


"La fuerza de la retribución se irá agotando de forma gradual de igual manera que una enfermedad...va perdiendo de forma gradual su perniciosa infuencia cuando el paciente transpira".
Imagina que alguien se ha pasado bebiendo. ¿Qué puedes hacer? Puedes darle un baño caliente o meterle en un baño. Si transpira, el alcohol se irá con la transpiración.
El Buda dice que los actos virtuosos son como l ...a transpiración. Tus hábitos inconscientes se evaporan con ella. Por eso, no hacer el mal es de hecho hacer el bien. No te intereses negativamente, sé positivo. Si te sientas y empiezas a pensar en todo lo malo que has hecho, pensando demasiado en todo ello, estarás alimentándolo. Prestar atención es alimentar, prestar atención significa seguir hurgando en la herida.
Toma nota, sé consciente, medita, pero no hurgues en la herida. Si lo haces la agravarás. Empezará a sangrar. Así que no te preocupes demasiado acerca de tus cositas, porque sólo son cositas.
Me han hablado de un santo que solía autoflagelarse cada mañana, gritando: "¡Dios mío, perdóname porque he pecado!". Así siguió durante cuarenta años, y se convirtió en una persona muy respetada; se le consideraba un santo, y nadie sabía que hubiera cometido pecado alguno porque era un hombre muy virtuoso. La gente le observó durante cuarenta años, estaba en el centro de la atención, siempre estaba rodeado de gente. Cuando dormía también le rodeaba mucha gente, y nunca nadie le vio hacer nada erróneo; siempre rezaba. Pero cada mañana se autoflagelaba, y la sangre manaba de su cuerpo.
Siempre le hacían la misma pregunta: "¿Qué pecado has cometido? Dínoslo".
Pero él no abría la boca. Sólo cuando se estaba muriendo, dijo: "Ahora he de decirlo, porque anoche se me apareció Dios en el sueño y dijo: "Estás creando demasiadas expectativas. ¡Ya vale con cuarenta años! Es mejor que te lo diga, porque si no, no te permitiré entrar en el cielo. No has hecho nada malo"". De joven vio a una mujer hermosa y el deseo se manifestó en él, un deseo de aquella mujer. Ése fue el único pecado que cometiera -sólo un pensamiento-, y se había autoflagelado por ello durante cuarenta años. Incluso el mismísimo Dios tuvo que aparecérsele en un sueño: "Por favor...te lo digo porque vas a morir mañana. No te dejaré entrar en el cielo si continúas así. No has hecho ninguna barbaridad, y le estás dando demasiada importancia. No seas tan exigente".
Todos los errores son normales. ¿Cuál es el pecado tan extraordinario que has cometido? Ya se han cometido todos los pecados; no puedes descubrir ninguno nuevo, es muy difícil dar con uno nuevo. Es casi imposible ser original respecto al pecado. La gente ha cometido todo tipo de pecados durante millones de años. ¿Vas tú a encontrar uno nuevo? Es imposible, ¿qué podrías hacer? Bertrand Russell solía decir que el Dios cristiano parecía casi absurdo, porque dice que si cometes un pecado serás arojado al infierno para toda la eternidad. Pero eso es demasiado. Puedes arrojar a una persona al infierno durante cinco, diez, veinte, o cincuenta años. Si un hombre ha vivido setenta años, puedes arrojarle al infierno setenta años. Eso significaría que ha estado pecando continuamente durante setenta años, sin tomarse un respiro, sin vacaciones. Sí, puedes enviarle allí durante setenta años.
Y los cristianos sólo creen en una vida. Está bien que crean en una sola vida, ¿qué harían si no? ¡Por los pecados de una sola vida te arrojan al infierno para siempre! Piensa en los hinduistas... tantas vidas, una eternidad no bastaría.
Russell solía decir: "Cuento mis pecados -los que he cometido y también los que no he cometido, pero en los que he pensado- y no puedo imaginar cómo, a causa de cosas tan nimias, me van a arrojar al infierno para toda la eternidad, siendo torturado para siempre. Ni siquiera un magistrado muy duro podría enviarme a la cárcel más de cuatro años". Y tenía razón.
¿Qué errores puedes cometer? ¿Cuáles has cometido? No los llames pecados porque esa misma palabra está contaminada, contienen una condena. El Buda sólo los llama "agravios", actos torpes. Bonita terminología, actos torpes, actos en los que te has comportado con torpeza. Te encolerizas y dices algo poco elegante, o haces algo poco elegante... Sólo son agravios.
Osho- And The Buddha Said
Disertaciones sobre el
"Sutra de los 42 Capítulos"
Capítulo 3, Permaned Por Tanto Atentos
Págs. 56,58

2 comentarios:

celebrador dijo...

Chapeau, banderazo, pero ¿y lo hábil que resulta la culpa como herramienta manipuladora de individuos, y, con ello, de masas?, ¿qué me dices de eso?, ¿es que no resulta útil acaso?

carlos de Radiquero dijo...

Es un viaje de ida y vuelta. La culpa le sirve al manipulador y al manipulado.
Es como ir al médico y que te de una pastilla que te cure. Y así no tienes que preocuparte de corregir tus hábitos de vida que están provocando la enfermedad.
Ser libre es trabajoso. ay que pensar, hay que decidir y hay que apechugar con todo eso...

Demasiado trabajoso.